
Compras de última hora
Llevo diez minutos parado en esta esquina de la 111, en pleno corazón de Harlem. Un barrio eminentemente afroamericano en el que mi culito blanco no acaba de sentirse cómodo. No sé si serán las miradas aviesas, los cuchicheos o el empujón que acabo de recibir por parte del primo de Shaquille O’Neal (acompañado de un amenazador “Be careful in New York City”). No estaría aquí si no necesitara esa documentación falsa. ¿Vamos Cheng, dónde coño te metes?