Oí que había sido un fracaso de taquilla en EE.UU. Me lo esperaba. Leí que no se estrenaría en salas en España. Me lo temía. Dijeron que la directora no tenía control absoluto sobre la postproducción. Me preocupé. Expertos y aficionados la criticaron con dureza. Quizá tengan razón, pensé. Aún así, llevaba tiempo esperándola. Y es que sí, soy un fan del Punisher y este es mi review (click!).
Antes de nada he de advertiros que si acabáis de leer esto no podréis decir aquello de ‘kekorto’, el que avisa no es tirador (sí, es intencionado). Hecha la recomendación, vamos allá. Ejem, probablemente muy poca gente sepa que esta es la tercera película basada en el personaje. Hagamos pues un brevísimo repaso de las dos anteriores.
El Vengador (1989): Dirigida por Mark Goldblatt. El ya mítico Dolph Lundgren interpretaba el personaje de Frank Castle y por lo que parece a esta coproducción entre Australia y Estados Unidos poco le importó que el tipo fuera rubio, “nada que un buen tinte de pelo no pueda solucionar” – debieron pensar. También se olvidaron de la calavera. Joder, ¿por qué?
The Punisher (2004): Dirigida por Jonathan Hensleigh. De nuevo otro rubiales, en este caso Thomas Jane, interpretaba el personaje. La historia pica algo de la etapa de Garth Ennis y se cambia por completo el origen del personaje. También se rediseña la calavera (al menos aquí hay calavera, pensamos algunos). Para colmo, el presupuesto de la cinta se lo lleva un lamentable John Travolta. Con todo y con eso, la pelea entre el Punisher (Jane) y El Ruso (Kevin Nash) es imprescindible para todo amante del cine de acción. Hasta sale Roy Scheider.
Una vez hecho este repaso, vayamos a la película en cuestión. Antes de nada, quisiera advertir a los posibles espectadores que la distribuidora de la película pretende sacar unos eurillos de más haciéndonos creer que esta película es la continuación de la de Thomas Jane. Nada más lejos.
Punisher 2: Zona de Guerra cuenta con una nueva directora, la semi desconocida Lexi Alexander (Hooligans) y un nuevo Frank Castle, el esta vez sí moreno Ray Stevenson (Roma). Hay un villano (puzle) y… un momento. Estos datos los podéis leer en cualquier reseña. Esta es la visión del fan, demonios. Casi lo había olvidado.
DVD: Extremadamente caro (recién salido a la venta) para los escasos extras que ofrece. Pero tenía algo que me gustaba, una pegatina triangular que advertía del contenido para adultos en su interior. ¿Se trataría quizá de violencia gratuita? No lo diría teniendo en cuenta ese precio.
Títulos de Crédito: Me cautivaron desde el principio. Frank Castle preparándose para la batalla es algo que siempre funciona. Mézclalo con dibujos a lo Tim Bradstreet, muestra todo el arsenal, crea un logo atractivo que gira y finaliza esta parte con el chaleco antibalas y la calavera. Perfecto.
Presentación: Los diez primeros minutos de una película son fundamentales, pero lo son mucho más si hablamos de una película de acción. El inicio, el cumpleaños de Don Cesare, está basado en el arco argumental ‘En el principio’ de Garth Ennis. En esta parte vamos a ver también el origen del personaje de Jigsaw y el elemento clave de la trama. ¿A quién le importa esto? El inicio es espectacular, violencia a raudales, tiros, narices rotas, miembros que estallan, la demostración de que Frank Castle es una perfecta máquina de matar. Ni siquiera tiene compasión con la esposa del capo. Escenas que definen al personaje. Estoy solo en mi habitación y disfrutando muchísimo, ojiplático perdido.
Nudo: o lo que es lo mismo, la historia, trama o lo que yo llamo “el pretexto para la gran escena final”. Nick Santora, Art Marcum y Matt Holloway utilizan la fórmula ‘buffet’ para el guión. Esto es, un poquito de aquí, otro de allá y lo unimos como podamos que para eso somos guionistas, ¿no? El trío calavera cogió cosas de la etapa de Garth Ennis, se inventaron el origen de Jigsaw, etc. No es la mejor historia del personaje pero se agradece el intento por intentar meter cuantas más cosas mejor. Sí, el fan lo agradece (gracias). Esta parte nos deja otra gran escena, Frank sostiene en brazos a una niña y en presencia del inspector Budiansky le vuela la cabeza a un criminal. Escenas que definen al personaje.
Desenlace: La masacre final tendrá lugar en el ‘Bradstreet Hotel’, un gran homenaje para el mejor portadista del personaje y el tipo que ha definido el look de Ray Stevenson en la película. Un edificio en ruinas, miembros de bandas criminales por doquier y un solo hombre armado. Excelente. Aunque deslucido por el enfrentamiento final entre Jigsaw y el Punisher es una gran y larga escena final repleta de tiros, explosiones y quemaduras a lo bonzo. “This is just the beginning” (Esto es solo el principio) nos advierte irónicamente el Castigador al acabar con Jigsaw. No caerá esa breva.
Doblaje: Pésimo. Verla en versión original. Los diálogos no son nada del otro mundo y los disparos se escuchan igual. Y señores dobladores, un poco de coherencia, si el Punisher es ‘el Castigador’ en la película, Jigsaw debería ser ‘Puzle’, ¿no? Mira, lo pongo sin subtítulos y me dejo de gaitas.
Frank Castle: Ray Stevenson es, sin duda, lo más cerca que hemos estado del Punisher. Imponente planta, pelo engominado para atrás, gesto adusto y parco en palabras. Aunque no me entusiasma demasiado la excesiva disciplina marine de la que hace gala en la película he de reconocer que el tipo se lo ha currado (ver extras DVD). No hay más que ver cómo se mueve, la forma que tiene de llevar el arma, la agilidad al recargar,… todo muy profesional. Excesivamente profesional para mi gusto. Se muestra frágil ante la tumba de su familia y duro cuando se requiere lo contrario. Al principio de la cinta, Frank se rompe la nariz dando un cabezazo. En las sucesivas escenas vemos como siente molestias, con evidentes problemas de respiración. Ya en el coche, se sirve de un lápiz para arreglarse la tocha. Duro, aunque posible para Frank. Punisher no tiene superpoderes, es humano. Escenas que definen al personaje.
Personajes: Si por algo destaca Garth Ennis es por la galería de grandes personajes que tiene. Aquí aparecen unos cuantos, pero muy deslucidos. Martin Soap, Los Bulat (padre e hijo), Don Cesare, Maginty… Especialmente sangrante es lo de Ink y Pittsy, padre e hijo en la película, y dos despiadadas y carismáticas máquinas de matar en los comics. Pero si por algo me gusta esta película es porque por fin alguien se acordó de Microchip. Gracias por sacarlo y muy acertado elegir a Wayne Knight al que recordaremos haciendo de joven Micro con bastantes kilos de más en Parque Jurásico. El personaje del hermano vampiro de Jigsaw es invención de la directora. Desde aquí le decimos a Lexi que se dedique a dirigir y que los experimentos con gaseosa.
La Calavera: ¿Cuál es el problema? ¿Por qué no la quieren enseñar? Punisher es uno de los personajes con mejor diseño y que cuenta con más posibilidades de explotación. Una calavera, una calavera grande y blanca. Grande y blanca, ¿es mucho pedir? Aunque me gusta más el diseño académico de esta en comparación con la de la película de Thomas Jane, es casi imperceptible a no ser que esté bien iluminada. No acojona. Mal.
Regusto: Crecí dando vueltas por los pasillos del videoclub del barrio, el desaparecido Z.Q. Buscaba por las estanterías algo que me llamase la atención, algo preferiblemente con pistolas. Punisher: War Zone podría estar colocada entre ‘Asesinos Cibernéticos’ y ‘El Sustituto’, bien podría ser una mítica cinta de aquella época. Esas películas de acción de los 80 que tanto me entusiasmaban y con las que me crié. Era joven, no pedía mucho y disfrutaba con aquello. Justo como debiera ser. Parto de la base de que todo fan tiene su propia película del personaje en la cabeza, de ahí que estas adaptaciones casi nunca dejen a nadie satisfecho. Yo no lo estoy, pero nadie me quita esos 103 minutos de dedicación exclusiva al universo Punisher. Y este regusto. A mí, desde luego, me ha gustado.
Si queremos personajes definidos, yo digo que la mejor es la de Goldblatt. El Punisher es un puto loco y Luis Gossett es el poli que tiene que pararle los pies. Bien definido. No desafía las leyes del sentido común. Es verdad que Stevenson está bien en el papel de Punisher, pero no me gusta que la película se ponga de su parte. No me creo a los polis incompetentes que le dejan huir una vez tras otra ni tampoco que se le presente como un héroe a los ojos de los espectadores. Pero estoy de acuerdo con Custom, puede soprender a los maltratados seguidores del cómic original.
pos a mi tambien me ha gustado, pero como ya he dicho en otras webs, le falta algo, y decirles a los proximos productores que miren bien a quien van a financiar (me refiero que busquen un buen director) y que hagan un buen marketing como jesus manda, 😉