Como un chihuahua

Perfecto. Estoy escondido en un vestidor evitando que mi hermano pueda descubrirme haciéndome pasar por él. Pero lo peor de todo es que al otro lado de la puerta, el verdadero William Walnuts y su novia jadean como dos perros en celo. Las paredes son como papel de fumar y la caja de resonancia de este vestidor es un perfecto home cinema.

wwintimage12

“Cariño, estarás cansado del viaje, ¿no quieres darte una ducha?” o “¿tienes hambre? ¿Te apetece que vayamos a la pizzería que tanto te gusta?” ¿De cuántas formas distintas puedes distraer a un hombre? Yo os lo diré: más de cien. ¿Por qué el sexo, Julie?

Estoy cada vez más furioso y por un momento pienso en sacar a Walther de mi entrepierna y pegarles un buen susto. Sin embargo, mantengo la calma y aprovecho uno de sus momentos álgidos para salir a gatas de la habitación. Sí, ahora el perro soy yo. Un chihuahua para más señas.

Puede que no tenga derecho a estar celoso, pero desde hace un par de días le estoy dando vueltas a las mismas preguntas: ¿cuánto de Christoph le gusta a Julie? ¿Realmente le gusto? ¿No será a William al que ve mientras estamos juntos? Mi nuevo rostro me ha creado grandes inseguridades y no debería ser así. Mi nuevo rostro me debería haber llevado a una isla paradisíaca, como al maldito Tom Cruise en la película de los cócteles, joder.

Me despido con un sonoro portazo, pero seguro que ellos ni siquiera reparan en el estruendo. Bajo las escaleras de dos en dos, ansiando llegar a la planta baja lo antes posible. Ha llegado el momento de ejecutar el plan, cuanto antes mejor, no más retrasos. Tengo que llegar a casa y organizarlo todo para mañana por la mañana.

Cuando salgo del edificio, voy tan obcecado que no reparo en los pasos. Y ahora ya es demasiado tarde porque esos pasos van acompañados de un tremendo golpe en la cabeza que me hace caer fulminado. Fundido a negro y dolor…

Cuando recupero la consciencia voy en un coche con los ojos tapados. No puedo ver nada, así que me fío de mis otros sentidos. El olfato me dice que huele e ambientador barato, el tacto que la tapicería es vieja, calurosa y está muy sucia. Esto no me gusta un pelo y, para colmo, una voz desagradable taladra mi oído.

— William, cabronazo, no te he atizado tan fuerte así que despierta de una vez…

Ah, mi sexto sentido me dice que vuelvo a estar en un lío…

WILLIAM WALNUTS, una improvisada historia del Capitán Custom
center
Cuándo: de LUNES a VIERNES un capítulo diario
Dónde: http://www.kekorto.es
Me perdí el primero: No pasa nada, puedes leerlo aquí
También el segundo: Ese y el resto puedes buscarlos aquí

30 episodios de cirugía ilegal, envidia familiar y traición sexual a la luz de la Gran Manzana.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*